5.8.12

COMIDA PARA EL CEREBRO


El cerebro, como los músculos del cuerpo, reaccionan a la comida que ingerieres y justamente por ese motivo es que, según las diferentes comidas que elijas, rendirá de diferentes maneras.
La realidad es que el cerebro tiene predilecciones y según estudios parece “gustarle” mucho consumir ácidos grasos como el omega-3, los antioxidantes y las fibras. Incluir esta lista de alimentos en su dieta hará que su cerebro funcione mejor.
A continuación 20 alimentos que podrán ayudarnos a mejorar la concentración, la memoria, el tiempo de reacción, la motivación y a reducir el estrés entre otros beneficios para nuestra mente.
Alimentos integrales
Los alimentos integrales son grandes estimulantes del cerebro, contienen un gran porcentaje de ácido fólico y vitamina B6, muy importantes para su correcto desarrollo.
Este tipo de alimento son muy buenos para potenciar el riego sanguíneo, algo muy importante para cualquier órgano de nuestro organismo, especialmente el cerebro.
Nueces
Las nueces son uno de los grandes alimentos del cerebro. Aportan gran cantidad de ácidos omega-3, omega-6 y vitaminas B6 y E. También son unas grandes reguladoras de la serotonina, una sustancia que modifica nuestras emociones y sentimientos.
El ácido omega-3 es muy importante para el correcto funcionamiento de este órgano, siendo muy beneficioso el que podemos encontrar en unas deliciosas nueces.
Anacardos o nueces de la India
Los anacardos son ricos en magnesio, ayudando a relajar el músculo liso de los vasos sanguíneos lo que hace que éstos aporten más oxígeno al cerebro a la vez que ayuda a prevenir los dolores de cabeza y las migrañas.
Almendras
Las almendras son una fuente de fenilalanina, sustancia que ayuda al cerebro a producir dopamina, adrenalina y noradrenalina.
En las almendras también podemos encontrar un gran aliado para mejorar nuestra memoria o superar estados depresivos.
Nuez del Pecán
El fruto del árbol Carya illinoinensis y los cacahuetes aportan choline, un importante nutriente especialmente recomendado para potenciar nuestra memoria y el desarrollo cerebral en general.
Arándanos
Estas bayas son grandes potenciadoras de nuestro cerebro, ayudan a preservar su correcto funcionamiento y ayudan a incrementar la potencia de las señales enviadas por las neuronas.
Los arándonos ayudan a prevenir la oxidación que nuestro cerebro va sufriendo con el paso de la edad, ayudando a reducir los efectos de ciertas enfermedades como el Alzheimer o la demencia senil.
Fresas
Al igual que los arándonos, las fresas ayudan a prevenir los efectos negativos que tiene la edad sobre nuestro centro de mando y mejoran la comunicación interna de nuestro cerebro.
La mora o zarzamora
Las moras contienen un nutriente muy beneficioso para nuestra salud mental, la antocianina o antocianidina, gran ayuda para prevenir la oxidación del cerebro y combatir la aparición de enfermedades degenerativas del mismo.
Pipas de girasol
Al igual que las nueces, las pipas de girasol son otro de los grandes amigos de nuestra masa encefálica. Contienen triptófano el cual es convertido en serotonina y aporta grandes beneficios, como ya hemos comentado antes.
Adicionalmente las pipas de girasol aporta tiamina o vitamina B1 que ayuda a incrementar nuestra memoria y la función cognitiva.
Pipas de calabaza
La parte más nutritiva de la calabaza y generalmente la parte menos ingerida, las pipas de calabaza aportan muchos nutrientes, entre ellos: Zinc, vitamina A, vitamina E y los preciados ácidos Omega-3 y Omega-6.
El Zinc es importante para nuestro cerebro, mejorando la memoria y agilizando las tareas mentales en general.
Té verde
Esta deliciosa bebida aporta catequinas al organismo, las cuales ayudan a luchar contra la fatiga cerebral, mejoran la memoria y ayudan a relajarnos.
El té verde ayuda también a luchar contra los desordenes cerebrales y aumenta la producción de dopamina, una sustancia esencial para nuestro cerebro.
Huevos
A pesar de ser mundialmente conocidos por ser una fuente de proteínas de gran calidad, los huevos aportan muchas más sustancias beneficiosas a nuestro organismo.
También podemos encontrar choline en los huevos, igual que en la nueces del Pecán, la cual ayuda a mejorar nuestra memoria. Esta sustancia aumenta el tamaño de nuestras neuronas lo que refuerza el envío de señales eléctricas.
Los huevos también aportan luteina y zeaxantina, dos de los mejores antioxidantes naturales que existen, previniendo el envejecimiento del cerebro.
Aguacates
Los aguacates son casi tan buenos para el cerebro con los arándanos, aportan grasas monoinsaturada, buenas para controlar y mantener un buen riego sanguíneo, esencial para nuestro cerebro.
Tomates
Los tomates contienen licopeno, otro antioxidante que nos ayuda a mantener joven y saludable nuestro cerebro a la vez que ayuda a prevenir enfermedades degenerativas del mismo.
Brocoli
Esta verdura contiene un gran cantidad de vitamina K, la cual ayuda a mejorar nuestra función cerebral y las funciones cognitivas.
Col Lombarda
Aporta polifeno, un antioxidante para nuestro cerebro, ayuda a prevenir enfermedades como el Alzheimer.
Berenjenas
Las berenjenas son muy beneficiosas para nuestra salud, contienen nasunin, una sustancia que actúa como antioxidante y también mejora la comunicación entre las células cerebrales y diversas moléculas transmisoras.
Espinacas
Ayudan a frenar los estragos que va produciendo la edad sobre nuestro cerebro a la vez que mejoran nuestra capacidad de aprendizaje y las tareas motoras de nuestro organismo.
Chocolate
El chocolate negro es un potente antioxidante que ayuda a prevenir enfermedades relacionadas con el avance de la edad en los seres humanos. Contiene numerosas sustancias estimulantes que aumentan la producción de endorfinas a la vez que aumentan nuestros niveles de concentración.
El chocolate con leche mejora nuestro tiempo de reacción y la capacidad de control y ayuda a incrementar la memoria tanto visual como verbal.

LA SUCIEDAD NOS HACE MAS FELICES


El contacto con una bacteria que vive en la tierra parece mejorar el aprendizaje y reducir la ansiedad, afirma un estudio llevado a cabo con ratones
Según científicos en Estados Unidos, los animales que tuvieron contacto con este patógeno -Mycobacterium vaccae- mostraron mejor capacidad para aprender nuevas tarea y mayores niveles de serotonina, el compuesto químico cerebral vinculado al estado de ánimo.
La M. vaccae “es una bacteria que vive en la tierra y es probable que la gente la ingiera o respire cuando pasa algún tiempo conviviendo con la naturaleza”, afirma la doctora Dorothy Matthews, profesora de The Sage Colleges en Troy, Nueva York, quien dirigió el estudio.
.
Mejor aprendizaje, menos ansiedad
Estudios en el pasado habían mostrado que la M. vaccae, inyectada en ratones, lograba estimular el crecimiento de algunas neuronas provocando una mejora en los niveles de serotonina y una reducción de la ansiedad.
Como se sabe también que la serotonina podría tener un papel en el aprendizaje los científicos decidieron investigar si la M. vaccae podría mejorar la inteligencia.
Con ese fin, la doctora Matthews condujo una serie de experimentos con dos grupos de ratones, uno había ingerido la bacteria viva y el otro no había tenido contacto con el patógeno, y estudiaron la capacidad de los animales para trasladarse por un laberinto.
“Encontramos que los ratones alimentados con M. vaccae viva navegaron por el laberinto dos veces más rápido y con menos ansiedad que los ratones del otro grupo”, dice la investigadora.
En un segundo experimento los científicos retiraron la bacteria de la dieta de los ratones y se volvió a estudiar su conducta en el laberinto.
Aunque los ratones corrieron por el laberinto más lentamente que cuando habían ingerido la bacteria, en promedio corrieron más rápido que los ratones que no habían consumido el microbio, dicen los investigadores.
“Creemos que estos resultados son importantes porque sugieren una relación entre los microbios y la función cerebral”, dijo a la BBC la doctora Matthews.
Hotel de microbios
“De hecho, esto tiene sentido si pensamos en la forma como evolucionamos como humanos que solíamos pasar gran parte del tiempo cazando e interactuando con la naturaleza”.
“Los humanos somos un ‘hotel microbiano’ ya que contamos con unos 10 microbios por cada célula que tenemos en nuestro cuerpo, o sea compartimos nuestro organismo con trillones de microbios”, dice la científica.
La investigadora cree que aunque el nuevo estudio fue llevado a cabo en ratones, podría especularse que pasar tiempo en el exterior donde está presente la M. vaccae podría tener también un impacto positivo en humanos.
De cualquier forma, expresa la investigadora, son bien conocidos los efectos positivos de pasar tiempo en contacto con la naturaleza.
“Así que el mensaje para la gente es salga al exterior, interactúe con la tierra, porque quizás esto lo podrá beneficiar de formas que nunca se imaginó”, afirma la científica.
La investigación fue presentada durante la conferencia anual de la Sociedad Estadounidense de Microbiología que se celebra en San Diego, California.